Friday, February 8, 2008

Mie 16: Capanema (Brazil)


Mercedes, Oscar, Isidro

600km

Estuve en la mañana en un taller reponiendo los tornillos perdidos para que el farol quedara sujeto, y de paso limpiamos el filtro de aire, y ajustaron un poco los giros para que no se cayeran del todo. Pensaba quedarme un día entero en asunción pero justo se iban de viaje esa noche, así que partí al mediodía. La frontera con brazil fue algo lenta, el trámite de aduana si bien me atendieron rápido es mucho papeleo, por suerte gratuito. Luego de luchar con el portugués terminamos hablando en inglés. No me hicieron problema tampoco por la falta de chapa patente. Cometí el error de no comprar reales, cargué nafta con la tarjeta y me enteré en el peaje (20km más adelante) que necesitaba 3 reales (equivalente a un dolar) y tenía que regresar para cambiar. Unos pibes de ahí me mostraron un modo de esquivar el peaje por un lugar que la moto pasa, la trepada no era del todo fácil y en mi primer intento no llegué bien hasta arriba y tuve que dejarme regresar hacia abajo, logré esto muy bien hasta el último punto en el que quedé demasiado inclinado (con la moto ya detenida) y no pude sostenerla. Esta iba a ser como la quinta vez que la dejé caer, por suerte fue la última vez en el viaje. Mi tobillo quedó algo sentido creo que por un momento algo lo atrapó, me dolió un poco por tres días y quedó algo morado. Los pibes que iban en moto me ayudaron a levantarla, porque había quedado inclinada más de lo levantable por una sola persona. En el segundo intento subí cómodamente y pude esquivar el maldito peaje. Cambié dólares en la siguiente estación de servicio. Logré llegar a Capanema sin más novedades que una nueva picadura de abeja en el brazo igual a la de méxico, por suerte o la saqué rápido, o el veneno no era potente porque no me dejó casi marca.
La nafta de brazil es tan mala como la paraguaya, le ponen alcohol y la moto no pasa de 110km/h, además es carísima, eso, más la demora en la aduana y que salí al mediodía hizo que no pudiera avanzar demasiado, apenas 600km, hasta Capanema una pequeña ciudad pegada al noreste de misiones. Eso implicaba que iba a ser muy difícil llegar a Colonia al día siguiente (1300 km). Sólo si salía a las 5am...
Encontré un Hotel demasiado bueno para que estuviera dentro de mi presupuesto, el Magestic. Plinio un muy buen hombre que es el dueño me atendió muy bien y me dijo que no me preocupara por el dinero, me dio un par de sandwiches, pude usar un rato internet, ducharme (baño privado), aire acondicionado, en fin, había llegado al paraiso.

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